El conjunto sonoro que conforma esta propuesta, un encargo del festival De lugares e Órganos (Santiago de Compostela 2020) está planteado alrededor de dos elementos que conviven y dialogan; la instalación autónoma llamada Organismo I, una suerte de autómata que emula un repertorio de sonidos asociados con el mundo natural, y una serie de piezas breves que parten de la conversión de grabaciones de campo de diferentes locacalizaciones geográficas a las características de este instrumento histórico.
This proposal, commissioned by the festival De Lugares e Órganos (Santiago de Compostela 2020) is set around two elements that coexist and dialogue; the autonomous installation called Organismo I, a sort of automata that emulates a repertoire of sounds associated with the natural world, and a series of short pieces for organ composed by means of converting field recordings from different geographical locations to the characteristics of this historical instrument.
Este trabajo surge de la idea de la mímesis musical del paisaxe sonoro, ámbito este último en el que se sitúa gran parte de mi trabajo artístico.
Partiendo de una investigación relativa a los registros especiales que encontramos en algunos órganos, principalmente durante el período Barroco, destinados a imitar sonidos paramusicales, como el de los pájaros o el de los truenos, Organscape profundiza en la idea de la representación de nuestro entorno audible a través de una serie de obras escritas para este instrumento y una instalación sonora. En este sentido no se trata tanto de conseguir una imitación fiel, sino de esbozar ciertas características acústicas del material evocado, el viento o un enjambre, por ejemplo. Una tensión que nos sitúa entre la utopía y la distopía.